II: El Coleccionista #2: Las rosas de Mayo
III: El Coleccionista #3: Los niños del verano
IV: El Coleccionista #4: LA TEMPORADA DE LOS NIÑOS DESAPARECIDOS
«Algunas veces no reconocemos nuestros límites hasta que los hemos cruzado.»
«Es cuidadoso con su ira; se esfuerza mucho por no explotar salvo en situaciones adecuadas o útiles, […]»
«Claro que hemos tenido decepciones, pero también hemos visto milagros.»
«La esperanza es poderosa. —Los griegos pensaban que era el peor de los males. El único que Pandora logró volver a encerrar.»
«Hay gente por todos lados queriendo ayudar, pero la mayoría sólo estorba.»
*La familia tiende al caos.*
«Toma mi cabeza entre sus manos como si fuera un frágil tesoro y no puedo evitar preguntarme cuánta rabia hierbe bajo su piel si siente que debe ser así de cuidadoso.»
«Porque hay una diferencia entre no avergonzarse de sus cicatrices y exponerlas para que todos comenten al respecto.»
*autodesprecio que despierta el haber dejado que me manipularan para hacer algo que no quería*
«Aun así, me encantaría prenderle fuego y verlo arder.»
«—Ustedes y sus vacío legales.
—Los vacíos son el alma de las leyes.»
«No podía entender que en realidad no tiene nada que ver con quién eres o por dónde andas, que sólo es una cosa de sentido común si eres una mujer que anda sola por la calle.»
«Comencé a preguntarme cuándo decidí que estar desesperado equivalía a estar equivocado en vez de ponerme a investigar a fondo.»
«La vida sí que sabe cómo burlarse de nuestras elecciones.»
«Estoy en ese estado de atención exaltada, donde todo se siente demasiado real pero a la vez irreal.»
«Esas veces en que estoy demasiado sobreentrenada para caer en un ataque de pánico pero que tampoco estoy bien, cuando siento que todo está por salirse de debajo de mi piel y necesito volver a hundirlo hasta mis huesos, donde pertenece, y es entonces cuando el acto, el ritual de fumarme un cigarro, es extrañamente relajante.»
«Ya son adultas, profesionales en sus trabajos, pero aquí, con esta familia hecha pedazos, se portan como las adolescentes que no pudieron ser, pues sus experiencias las marcaron demasiado para permitirles ser jóvenes.»
«Sanamos, casi por completo, pero también las cicatrices pueden sangrar.»
«Más viejo de lo que es, quizá tan viejo como se siente—.»
«La gente se hace daño, especialmente cuando se ama. Lo que importa es por qué y lo que haces después.»
*sentía que gran parte de mí estaba en riesgo*
«¿Cuántas personas nos permitimos simplemente sentir algo, en vez de intentar vencerlo o quitárnoslo de encima?»
«No importa si estás entrenada para verlo en otras personas; es diferente cuando se trata de ti.»
«—¿Cómo dejaste de sentirte culpable? […]
—No dejé de hacerlo.»
«No es sólo que esté sobreviviendo, disfruto de lo que tengo. Y estoy un poco harta de que la gente me diga que no es suficiente.»
*—Descubriste lo que te estaba frenando.*
«[…] la experiencia, lo que has pasado, siempre te afectará. Pero, hijo, tú decides cómo te moldea. Tú decides cómo reaccionar.»
«[…] si exiges un cambio y lo haces de modo que resuene en cada persona que esté en posibilidad de llevarlo a cabo, tal vez llegues a algún lado.»
•
«Pero si quieres un cambio que perdure, lo haces de la manera difícil, no como algo que sólo se siente mejor en el corto plazo.»
«Puedes perdonar el acto, pero no trates de absolver las consecuencias.»
«Si no puedes consumir cafeína, el truco es tomar mitad descafeinado, mitad chocolate caliente. El chocolate ahoga las notas más desagradables del descafeinado, pero deja suficiente sabor para que sientas como si tomaras café.»
«Somos responsables de las heridas que provocamos, sobre todo si es por accidente. Los que somos de mecha corta debemos ser extracautelosos con aquellos a los que afectamos.»
«Pero tal vez Xiomara tenga razón y las personas deban responsabilizarse y asumir las consecuencias de aquellos incidentes que provocan sin querer.»
«No importa cuántas veces repitamos las mismas palabras. Él, igual que Ian y Bran y tantos otros, sólo las aceptarán cuando puedan, y no antes.»
*la familia es más que la sangre*
«Cuando alguien pregunta, responden que aún discuten la idea de buscar un tratamiento. Creo que es una respuesta más sencilla que tratar de explicar por qué rechazar un tratamiento no es igual que renunciar a la vida.»
«—Hace tiempo dejamos de tener esperanzas de que este día llegara.
—No lo hicieron —[…]—. Dejaron atrás las expectativas de que este día llegara.»
Una niña desaparecida se convertirá en el inesperado vínculo que puede resolver una terrible tragedia del pasado.
Brooklyn Mercer, de ocho años, fue vista por última vez cuando regresaba de la escuela y desde entonces no se sabe nada de ella.
A pesar de que podría ser un caso más para los agentes del FBI Eliza Sterling y Brandon Eddison, entre más conocen los estremecedores detalles que envuelven el crimen, este se torna cada vez más indescifrable y complejo: primero, porque descubrirán que la desgracia de Brooklyn guarda asombrosas coincidencias con la desaparición de la hermana de Eddison décadas atrás; y segundo, porque la niña perdida es inquietantemente parecida a Eliza, tanto, que cualquiera diría que son madre e hija.
Conforme avanza la investigación, averiguarán que Brooklyn no es la única niña perdida con características idénticas, sino que es solo la más reciente en una larga lista de raptos cometidos a través de los años por todo Estados Unidos.
La última entrega de la serie El jardín de las mariposas te robará el aliento. Una carrera contrarreloj empieza, ¿podrá la Unidad de Delitos Contra Menores resolver este crimen y su inesperada relación con un misterio que los ha acechado durante años?
En éste la protagonista es Sterling (Eliza).
Los niños del verano es más desgarrador, más brutal, por todo lo que sufren esos niños; éste es de todos el más emotivo, toca muchos temas delicados y te deja al borde de las lágrimas en muchos momentos.
El desenlace final que le da a la saga… Meh, me servía sin ese desenlace para la unidad. Me quedo con la historia sin esa última página. MUY BUENA SAGA. Y MUY BUENA AUTORA.
Lo mejor de la saga es que vemos cómo funciona un caso desde
todas las perspectivas: en el primero, la de la víctima; en el segundo, la de
la familia de la víctima; en el tercero, la de una antigua víctima que fue
salvada; y en el cuarto, el punto de vista de la familia del culpable.
Siguiendo en todo momento el caso con los agentes del FBI: Brandon Eddison,
Mercedes Ramírez y Eliza Sterling principalmente.
